Un bitcoiner afirmó recientemente que el comportamiento de los homicidios tendió a la baja con la adopción del bitcóin, pero los datos indican que esto es falso.
Angélica Cárcamo
El bitcoiner Max Keiser afirmó en su cuenta de Twitter que “desde que se adoptó el bitcóin como moneda de curso legal, la violencia y los homicidios se han reducido casi a cero” en El Salvador. Afirmación que es falsa.
Al cierre de esta nota, el tuit publicado el 28 de mayo tiene más de 2 mil me gusta y más de 500 comentarios, en su mayoría de críticas a Keiser. Pero, ¿por qué es falsa dicha declaración?.
Los homicidios, el pacto con las pandillas y el régimen de excepción
El bitcóin es moneda de curso legal en El Salvador desde septiembre del 2021. En ese mes se registraron 131 homicidios, la tercera cifra más alta del año y en octubre se reportaron 158 asesinatos, la cifra más alta durante un mes en 2021.
En 2022, se contabilizaron 87 asesinatos entre el 25 al 27 de marzo de 2022. Solo el día 26 se computaron 62 muertes violentas, la cifra más alta de este siglo.
Este repunte de finales de marzo hizo que la Asamblea Legislativa, por petición del Gobierno de Nayib Bukele, aprobara un régimen de excepción por 30 días para combatir a las pandillas.
Este régimen se ha prorrogado en dos ocasiones y durante su vigencia suman más de 36 mil capturas, así como críticas por parte de organismos de derechos humanos nacionales e internacionales.
Al menos 11 personas detenidas en este régimen han fallecido bajo custodia de las autoridades, según se reconoció oficialmente hasta inicios de mayo, sin tener mayor información de las causas.
Un informe del Instituto de Derechos Humanos de la UCA (IDHUCA) señaló que la población carcelaria aumentó un 232%, lo que significa una sobrepoblación en los penales.
Recientemente una publicación del periódico digital El Faro expuso que el repunte de homicidios se debió a la ruptura de un pacto del Gobierno de Bukele con las pandillas.
Estos datos permiten señalar que es falso que el bitcoin fue el detonante para la reducción de homicidios como lo publicó Keiser y que no existe una relación directa entre su adopción y el comportamiento de la violencia.
