El 22 de noviembre de 2024 la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) dictó sentencia en contra del Estado de El Salvador por violencia obstétrica en el caso Beatriz ocurrido en 2013.
En resumen:
- La Corte IDH declaró a El Salvador responsable por violar los derechos de Beatriz, quien sufrió retrasos en su atención médica por falta de protocolos claros pese a su embarazo de riesgo.
- Según la Corte IDH violaron los derechos a la salud, la integridad y el acceso a la justicia, incluyendo violencia obstétrica en su tratamiento.
- El Salvador deberá crear protocolos médicos, capacitar al personal y pagar $240,000 en indemnización.
Por Diego Rosales
La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) declaró responsable al Estado de El Salvador por violencia obstétrica y violación al derecho a la salud en el caso de Beatriz, una mujer a quien se le negó la interrupción del embarazo en 2013, pese a que puso en riesgo su vida.
“Beatriz”, que en ese momento tenía 22 años de edad, enfrentó un embarazo de alto riesgo debido a enfermedades graves como lupus eritematoso sistémico, nefropatía lúpica y artritis reumatoide.
Fue diagnosticada con un embarazo anencefálico, condición incompatible con la vida extrauterina, y considerada en riesgo vital debido a sus enfermedades preexistentes. Desde el inicio, los médicos reconocieron que el embarazo complicaría su ya delicada salud, pero la falta de lineamientos claros sobre cómo proceder ante este tipo de casos obligó al personal médico a someter las decisiones clínicas a consultas legales.
La joven, que también era una madre de un niño de 13 meses, sufrió graves afectaciones por la falta de protocolos médicos claros y el manejo judicializado de su situación, denunciaron en su momento organizaciones feministas que defienden los derechos reproductivos de las mujeres.
Una década después, la Corte IDH determinó que el Estado “violó los derechos a la integridad personal, la vida privada, la salud y el acceso a un recurso judicial efectivo, consagrados en la Convención Americana sobre Derechos Humanos. Además, se constató la existencia de violencia obstétrica debido al trato deshumanizante que Beatriz recibió al no acceder a una atención médica adecuada y oportuna, generando graves consecuencias para su salud física y emocional”.
El vicepresidente de la Corte IDH, Rodrigo Mudrovitsch, señaló que “la sentencia constituye por sí misma una forma de reparación por unanimidad”.
La Corte subrayó que el Estado salvadoreño tenía el deber de proteger a Beatriz mediante atención médica adecuada y diferenciada, en consonancia con sus condiciones de salud y el riesgo que enfrentaba.
“Para mí ha sido un triunfo (la sentencia), yo sé que no ha sido fácil, pero el Estado tiene el deber y el derecho de responder a las medidas que la Corte le ha puesto y para mí, es un gran triunfo”, dijo en conferencia de prensa Delmy, la madre de Beatriz.
Como parte de las medidas de reparación, la Corte ordenó a El Salvador implementar reformas estructurales que incluyan la creación de protocolos médicos claros para atender embarazos de alto riesgo, capacitación para el personal médico y judicial en derechos reproductivos, y la publicación de la sentencia para reconocer públicamente las violaciones cometidas.
“Hoy es un día histórico: se ha hecho justicia para Beatriz. El tribunal de derechos humanos más importante del continente americano ha hecho justicia para Beatriz, para su familia, para su madre”, manifestó Morena Herrera, defensora de derechos humanos.
Herrera agregó que la Corte reconoció que todas las mujeres que se encuentran en una situación de embarazo de alto riesgo y no sean atendidas, esa falta de atención puede ser reclamada como un hecho de violencia obstétrica que deben reparar los estados.
“Es una obligación que queda establecida por la Corte”, dijo la defensora de derechos de la mujer.
La sentencia manda a revisar directrices y guías para que tanto como el personal médico, como las mujeres que sean pacientes, puedan tener la atención adecuada.
Además, el Estado salvadoreño deberá pagar un total de $240,000 dólares en concepto de reparación integral a los familiares de Beatriz. Este monto incluye indemnizaciones por daños materiales e inmateriales, así como el reintegro gastos relacionados con el proceso.
