Diputados y funcionarios del Gobierno de Nayib Bukele emitieron afirmaciones falsas y engañosas en el marco de la nueva ampliación de la suspensión de derechos
A pesar que el presidente en su discurso del cuarto año de gestión afirmó que su Gobierno le rinde cuentas a los salvadoreños, en la práctica no hay transparencia ni procesos de rendición de cuenta.
El foco gubernamental se centra en la “salida” del top 10 de países con mayor flujo migratorio a Estados Unidos, pero se trata de un dato parcial del cual se omiten los contextos de otros países.
Nayib Bukele afirmó que El Salvador no entró en el top 10 de países que más migrantes envían a Estados Unidos y que es un avance, pero se basó en un dato aislado.
El jefe del grupo parlamentario de Nuevas Ideas (NI), Christian Guevara, afirmó recientemente que en la Asamblea Legislativa “no hay persecución, censura, ni se viola la libertad de prensa”, afirmación que es falsa.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Corte Interamericana de Derechos Humanos consideran que la colegiación obligatoria de los periodistas es contraria a la libertad de expresión.
El Diario El Salvador retomó una declaración del ministro de la Defensa, René Merino Monroy, sin cuestionar la forma en la que el Gobierno excluye de sus registros los homicidios de pandilleros.
En un informe presentado a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), el Estado salvadoreño afirmó que únicamente se han judicializado 5 homicidios de los más de 80 que llevaron a aprobar el régimen de excepción. Acá te explicamos qué más dijo el Estado.
El lobista Damián Merlo exaltó la política de seguridad de Bukele, cuestionó a la comunidad internacional y desinformó sobre el régimen de excepción desde el Miami Herald.
El presidente de la Asamblea Legislativa, Ernesto Castro, afirmó que el régimen de excepción no tuvo como motivo la ola de asesinatos registrados a finales de marzo. Infodemia revisó las grabaciones de sus intervenciones y los decretos, esto permite señalar que es falsa su última declaración sobre el tema.