Infodemia elaboró un recuento no oficial de 35 feminicidios ocurridos en El Salvador durante el año 2024, cuando las autoridades aseguraron en su propaganda que el país centroamericano se convirtió en la nación más segura del hemisferio occidental.
Solo pocas imágenes de un video de más de un minuto que fue publicado por el presidente inconstitucional Nayib Bukele en X corresponden al antiguo Hospital Rosales, el resto pertenecen a otros edificios más actuales.
A conveniencia, el oficialismo mantiene una campaña de desprestigio y desinformación sobre los Acuerdos de Paz que pusieron fin a 12 años de guerra civil y que posibilitaron la creación de instituciones para avanzar democráticamente.
En su primera conferencia de prensa del 2025, Nayib Bukele difundió información falsa y engañosa sobre temas clave como la inexistencia de contaminación por minera en El Salvador y las supuestas ganancias obtenidas por el país gracias al bitcóin.
El régimen de excepción en El Salvador, aplicado para combatir la delincuencia, ha reducido los índices de violencia según el gobierno, pero también ha desencadenado denuncias de detenciones arbitrarias, vulneraciones a derechos humanos y traumas psicológicos a inocentes detenidos y a sus familiares.
Hay un régimen de terror contra los empleados de gobierno que osan revelar las deficiencias en los sistemas de salud y educación, o simplemente ejercer el derecho a la libertad de expresión y contradecir de paso la propaganda gubernamental. Todo aquello que ponga en duda la eficacia o la imagen de la administración entra en el campo minado del crimen y del consecuente castigo. Espionaje, humillaciones y chantajes son algunos de los mecanismos de los que se vale el gobierno de Bukele para intentar reprimir reclamos de derechos laborales o señalamientos hacia todo aquello que controvierta el discurso oficial.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) hará una audiencia pública el próximo martes 12 de noviembre para examinar las reformas constitucionales promovidas por el gobierno de Nayib Bukele en El Salvador y su impacto en la democracia y los derechos humanos.
Previo a una visita oficial del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, a Costa Rica, su homólogo Rodrigo Chaves declaró a la prensa al menos dos afirmaciones que entran en la categoría de Falso.
El presidente Nayib Bukele afirmó que Michelle Bachelet, expresidenta de Chile y ex alta comisionada de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, se “deshizo en elogios” para el Gobierno salvadoreño en una visita oficial en 2015. Esta afirmación es falsa, ya que en ninguna de las 8 intervenciones públicas de Bachelet pronunció tales elogios, ni se pronunció sobre políticas internas.
Aunque muchos salvadoreños se oponen a las reservas de información y las dispensas de trámite en la Asamblea Legislativa, una parte significativa de la población apoya estas medidas, motivada por su fe en el presidente Nayib Bukele.
A pesar de que la Ley de Acceso a la Información Pública (LAIP) dice que los viajes de los funcionarios es información de acceso público, la Presidencia de Nayib Bukele declaró la reserva por cinco años de los viajes realizados por el comisionado presidencial para Derechos Humanos y Libertad de Expresión, el colombiano Andrés Guzmán Caballero.
Durante su reciente visita a Argentina, el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, abordó públicamente temas de seguridad, economía y empleo. Sin embargo, su discurso presentó afirmaciones engañosas.
Dos observatorios digitales contra la censura en internet afirmaron que la plataforma de mensajería reportó fallos y bloqueos en al menos cinco redes en El Salvador. La Presidencia no ha hecho comentarios a peticiones de Infodemia.
Bukele afirmó que en el país se garantiza la libertad de expresión, que no se dan arrestos y que no existe censura, lo que es engañoso. Diferentes informes señalan un escenario contrario.